viernes, 18 de agosto de 2006

Vogue

"Vogue" es tanto el nombre de una revista tremendamente manipulada por la industria cultural, como también el título de una canción de Madonna, que a juicio de muchos, la convirtió en el ícono pop por excelencia en el año 1990.


Formaba parte de un álbum asociado a la película Dick Tracy (I'm breathless), lo que por asociación le daba un aire retro a toda la producción contenida en él. No obstante la intérprete de este tema estuviere de cumpleaños el miércoles pasado, el motivo de recordar a "Vogue" obedece al despliegue corporal involucrado en esta canción. Preocupado de aprender un poco sobre los pasos del baile, por si algún día alguien me cobraba en una fiesta la ejecución de esta coreografía (conociéndome, en condiciones ideales accedería a imitar el video) di de casualidad con un artículo en inglés que daba cuenta del origen y evolución de la misma, convirtiéndose en un despliegue marica registrado.

Para quienes no puedan leerlo, puedo contar que esto viene a representar una evidencia de grueso calibre respecto de mi columna anterior. Esto en la medida que el "vogueing" era un estilo de baile ampliamente difundido en los clubes gay neoyorkinos, principalmente de los bajos fondos, lugares concurrían tanto latinos como negros. Tiene por principio imitar posturas glamorosas de las estrellas Hollywood de antaño, como de las covergirls de la revista en cuestión. Para conseguirlo existen una serie de movimientos de manos y brazos, posturas geométricas, descripción de líneas rígidas, entre otras cosas.

Claramente, Madonna, como buena capitalista que es, introdujo a la cultura de masas un elemento enteramente marginal, convirtiéndolo en un guiño de distinción que induce a la compra de todo el fenómeno. Ahora bien, es cierto que jamás he visto a ningún individuo heterosexual practicar el vogueing, y más aun, tampoco he visto a ningún gay hacerlo en serio. De todas formas, se supone que estuvo muy de moda en aquel entonces y más de alguien debe haber aprendido y practicado la coreografía.

Hoy luce un poco ridícula, como todo lo que tiene que ver con esos años, con los cuales todavía no hay una distancia suficiente como para que parezcan cool. Pero en fin, lo importante de esta reseña es destacar que como todos estos fenómenos de baile maqueteados (sea la Macarena, el Meneíto, la Mayonesa etc.) hay un asunto de formar parte de un colectivo atendiendo a la necesidad de integración que todo individuo tiene, y que en este caso, se aplican a un ordenamiento de la mecánica del cuerpo. Luego, lo novedoso de esta gimnasia gay es que tal inclinación se convierte en la imitación icónica del glamour, de lo intrascendente que parece trascendente, quizás con el deseo de ubicarse, por un momento, más allá de todo lo requerido por la vida corriente y toda la marginación sentida por la complicación homosexual.

Resulta ingenuo pensar que el público corriente haya inventado estas Escuelas (sí, hay Escuelas de Vogue) puesto que debe ser fruto de gente que ha hecho una profesión de estos inventos. Todo nacería como un asunto de propuesta, de recodificación de gestos antiguos y de actualización del deseo de inmortalidad aparente. Si pensamos que latinos y negros se encargaron de desarrollarlo, se hace aún más evidente como este binomio marginal/central no constituye en sí mismo una barrera, sino que incluso un punto de unión. Es como toda representación homosexual de una diva. Puede ser que no sea imitando las fotografías de Rita Hayworth sino más bien su estilo de vida: la ropa, el acicalamiento, el modo de hablar, la lejanía del desenfreno al bailar. La diferencia con la práctica del Vogue, es que toda esta otra coreografía se diluye en el mainstream y no parece acentuar la contradicción masculino/femenino que subyace a él.

Quizás Madonna nunca se propuso esto al bailar así.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Una maravilla leer tu blog.
Un abrazo grandote,

Anónimo dijo...

Jojo... mansa teoría loco... = es cierto el asunto. Si bien, el Vouge es una escuela, tal parece ser llevado como un estilo de vida. Bueh, = no sé que onda, pero no leí too el artículo. Sin embargo revisé los otros y siguen causando risa y una diversificación de sensaciones, por lo que se puee decir que es un éxito.
Ya Pablito, cuidate mucho, toma con moderación, y si eso ya no corre, pues... toma hasta no irte de Guajardo XD
Saludos hemanito!

PD: Exijo pongas mi flog en tus links =P