jueves, 13 de julio de 2006

Queer Theory

Hace muy poco me compré un lector de DVD para el dormitorio. Acto seguido, debía conseguir discos para ocuparlo. Consultado sobre mi elección, recibí un único comentario de mi hermano diciendo "you're so gay". La razón, tenía en mi poder un álbum de George Michael (nunca ha sido santo de mi devoción, pero estaba barato) y un ejemplar de Brokeback Mountain, que juntos constituían una especie de conjunción neurótica para matar el tiempo.

Independientemente de mi gusto por la película y del morbo producido por el cultivo de la melancolía invernal que ha sido reflejada en este blog; luego de citar mentalmente su música me puse a indagar en wikipedia acerca de Gustavo Santaolalla, para luego llegar al sitio de Ang Lee, al link del filme y al acápite sobre homosexualidad. Ahí detuve la navegación automática.

Sin ánimo de alabar la confiabilidad de mi investigación, se abrió todo un nuevo campo de discusión. Para quienes han visto la película, muchas cosas pueden acontecer en sus recuerdos. Para mí lo más impactante era el cultivo de la soledad medio decidida del protagonista y la inevitable sensación corporal que esto causara considerando que fui al cine a verla solo. Luego vendría toda la polémica que esto causara en los medios, la prohibición de exhibición en algunos países y en el mismo corazón de Estados Unidos (o sea! en Nevada prohíben estas cosas, pero la prostitución legal y los matrimonios con un reverendo vestido de Elvis pasan sin problemas)

No obstante, encontré algunos foros sobre Queer Theory que es toda una corriente que filosofa sobre esto que es ser homosexual en sociedad. Se supone que todo lo inauguró Foucault al afirmar que este asunto del género es una construcción social y no sirve para entender el real fenómeno marica. De ahí en adelante una serie de libre pensadores han especulado sobre la naturaleza y devenir cola a lo largo del siglo XX y comienzos del XXI. Toda esta teoría es enjuiciada como reivindicativa y fruto de gays feos que como no pueden tirar el sábado, escriben para imaginar como sería hacerlo sin complejos.

Claramente, esto me puso en alerta. Pensaba cuánto podría haber de eso en mis ganas de aprender a partir de lo proyectado a partir de la película. Luego, cuánto prejuicio había afincado en la afirmación anterior. Ciertamente esto resultaba un campo interesante y al igual que el feminismo, se puede decir de todo acerca de los escritores, así como también escuchar tonteras de parte de ellos.

Supongo que una buena reflexión surge a partir de la problematización de lo cotidiano, ejercicio que ahora estoy intentando desarrollar. La Queer Theory postula que las etiquetas de roles son variaciones culturales, como también mentales. Mucho de aquello opera en mi conciencia, incluso al escribir esto. En adelante intentaré apropiarme de los contenidos de aquella sin ser como esos intelectuales de Nueva Inglaterra que por integrar terminan desintegrando (como los maricas cuicos que llaman loca a las comadres pobres)

Hay algo de vaquero islandés reflexivo a estas alturas. Mejor me pongo mis Levi's mientras escucho Sigur Rós de fondo preguntándole Mikää sinün nimesi on? a un rubio finés. A lo mejor llego a buen puerto.

3 comentarios:

Boris G. Isla Molina dijo...

Pablo:

Definitivamente tu vas más rápido que lo que yo puedo procesar y retroalimentar, al parecer el blog rompió una eclusa y ahora don Pablo se desarrama por el ciber espacio...bueno algunos comentarios a la QT

Siempre me ha parecido que las construcciones teóricas (a modo de exégesis o apologías)sobre lo gay son distinciones que operan sobre la conciencias con la misma violencia que los prejuicios. Por qué "lo gay" debe ser tratado de manera distinta (en relación a lo distinguible) por qué, por el hecho de ser heterosexual camino por las calles con la sola tensión de tener que expresar y desplegar mi sexualidad y sensualidad de manera muy natural, en cambio el gay lo hace problematizándola, revistiéndola de un halo neurótico que le da forma en nuestra sociedad, exponiéndola no en su función activa sino en su función replegada, justificada, antropológica, existencial.

De pronto me recuerdo que soy psicólogo, y que algo aprendí sobre el prejuicio y la discriminación...el rasgo que delata una minoría es hiperpresente, antecede al intercambio social, por ende todos lo rasgos que invitan al intercambio espontáneo pierden su vigor y todo gira en torno al rasgo delator, la sexualidad y sus condiciones son entonces un estigma y moneda de cambio entre las máscaras de la sociedad.

Pablo dijo...

En primer lugar, debo agradecer el reconocimiento cariñoso que haces de mi vida al asociar libremente esta columna a términos como "neurótico", "problematizado" y "moneda de cambio". Leyendo tu enrevesamiento sobre Heidegger me queda más que claro... en fin.

Sobre la QT: efectivamente el intento de construcción teórica tiene dentro de sus objetivos la eliminación de las etiquetas con el fin de comprender esa diversidad asociada no solo a lo gay (que a estas alturas ya se convierte en una cultura en sí misma, dialogando con el main stream mediante el consumo) sino a toda la diversidad de expresiones de la sexualidad.

Me adscribo a la reflexión cotidiana como manera también de resaltar la presencia contenida en sí misma, más allá de la expresión de la diferencia. Mal que mal seguimos siendo humanos, aunque si uso bien este estigma capaz que amplíe mis ingresos (y no me refiero a suscribirme a un fono erótico) Pero lo principal es ese deseo que todos tenemos en algún momento de sentirnos un igual, cosa que se agota detrás de una etiqueta

Boris G. Isla Molina dijo...

Pablo, querido

recuerda el viejo arte de la numismática...